Tres días después de la gloria europea, el Milan disputó (en el estadio San Siro) el partido de vuelta en la final de la Copa de Italia, ante la Roma (a la cual había vencido por 4:1 en la ida). La temporada siguiente disputaría en el estadio Old Trafford, la final de la Liga de Campeones contra la Juventus, camisetas de futbol baratas siendo la primera final disputada entre equipos italianos en esta competición.