Con un gol de Jorge Burruchaga resultó victorioso en el partido de ida en Porto Alegre. Tras empatar el segundo partido en Avellaneda, gritó por séptima vez campeón de América. Además se opone tajantemente a que los partidos de la divisional Intermedia sean los preliminares de la primera división. En la temporada 1952/53, el equipo debuta en la Segunda División y es un paso efímero ya que queda colista del grupo I y desciende nuevamente a la Tercera División.
